El miedo a perder el control sobre el pensamiento, el comportamiento o los impulsos es común en los trastornos de ansiedad. En cierto modo, este sentimiento o presentimiento es significativo con la experiencia de alta ansiedad. Si la ansiedad, como hemos señalado en otros trabajos en Internet, se relaciona con la percepción que tiene el sujeto de estar sobrecargado con sus propias capacidades y recursos, con las demandas y demandas del entorno (externo o interno), entonces naturalmente la experiencia es asimilada. a una pérdida de control sobre sí mismo o el entorno. : cuando alguien está luchando pero es manejable, se considera recursos, apoyo y habilidades de afrontamiento, diciendo coloquialmente: «Tenemos un problema, no ha surgido, pero es manejable.» Por el contrario, si nos sentimos desbordados o desbordados, decimos “tenemos un problema, no está resuelto, está bajo control”, es decir, estamos a merced de todo.
Es probable que la ansiedad modifique el desempeño de los repertorios conductuales, incluso aquellos que normalmente se “desvían” con la conciencia sin que medie su producción, ya sea porque son reacciones autonómicas o porque se automatizan tras el aprendizaje y el proceso de entrenamiento. : articulación y fluidez del habla, atención y concentración, respuesta sexual, conciliación del sueño, etc. sus funciones y facultades.
¿Por qué tengo miedo de volverme loco o enfermarme?
El miedo a volverse loco o enfermarse es una de las preocupaciones más comunes asociadas con los problemas de ansiedad. Está presente en personas que sufren ataques de pánico, agorafobia, fobia impulsiva, hipocondría, trastorno de ansiedad generalizada (TAG) y en algunos casos trastorno obsesivo-compulsivo (TOC).
El miedo a volverme loco se basa en que no me siento bien, lo cual es obvio porque cada día me siento más ansiosa e incapaz de hacerlo.
controlarlo, la ansiedad está aumentando y no puedo hacer nada para detenerlo. Por otro lado, no entiendo por qué me preocupo tanto, me parece que es excesivo e irrazonable, lo cual es una clara señal de que algo anda mal en mí… “¿Me estoy volviendo loco?
¿Qué puedo hacer para calmar los pensamientos irracionales?
Nadie cambia de pensamiento de la noche a la mañana, aunque insistamos, porque hay un ancla previa que dificulta cambiar el pensamiento.
Aquí hay algunas reglas simples para reducir los pensamientos irreales:
Eventos traumáticos como accidentes, violaciones…
Experimentar un evento traumático enciende alarmas en todo el cuerpo. el contexto en el que aparecen. Una persona que ha vivido una de estas experiencias traumáticas puede sentir una sensación de desrealización cuando se expone a una situación que le recuerda a lo que vivió. En algunos casos, se vuelve insoportable, y en otros, a pesar de el malestar, nos distanciamos y no nos preocupamos demasiado por la situación o lo percibimos como una forma de evitar el bloqueo.
Esta razón de desrealización me recuerda a Lola. Abusada sexualmente por un ser querido cuando era niña luego de su estadía, hace más de 40 años, luego de regresar a la casa donde ocurrieron algunos de estos hechos, este fenómeno ocurrió de inmediato. De repente vio todo desde la distancia. Se sentía incómodo, pero podía ver su entorno sin una parte de él. Sintió que hacía que el momento fuera un poco más soportable y menos irritante. En ese momento, no pudo evitar experimentar este sentimiento como algo patológico, algo cercano a perder el control de su mente. Sintió que había una pizca de locura en él, y temía que pudiera empeorarlo.
Aspecto Cognitivo
Comprender nuestra ansiedad nos dará una sensación de calma. Un buen ejercicio no es solo preguntarse por qué me preocupo, sino también explorar otras preguntas cuyas respuestas nos ayuden a superarlo:
- ¿Cuándo empecé a preocuparme?
- ¿Qué imágenes o pensamientos están pasando por mi mente en este momento?
- ¿Cómo sé si esto me está causando ansiedad?
- ¿Qué digo por dentro?
- ¿Son reales estos miedos?
- ¿Qué debo cambiar en mi vida para dejar de preocuparme?