¿Alguna vez has tenido que ver a alguien con un ataque de pánico y no sabes cómo ayudarlo? A continuación, repasamos lo que es práctico hacer.
Es importante mencionar que son episodios de 10 a 30 minutos donde se presenta la máxima ansiedad que un individuo puede experimentar con falta de control del pensamiento, muerte catastrófica y regulación del sistema nervioso autónomo. que es la que regula toda la actividad de nuestros órganos internos.
Síntomas de un ataque de ansiedad
Durante un ataque de ansiedad, recibes una ola de intensos síntomas físicos y mentales. Puede aparecer muy rápidamente y sin razón aparente.
Los síntomas incluyen:
¿Qué puedo hacer cuando tengo un ataque de ansiedad?
Una vez comprobado que la persona que tenemos delante sufre un ataque de ansiedad, lo más importante es intentar reducir sus síntomas más críticos. Se recomienda empezar por ralentizar la respiración ansiosa. Recuerda que la respiración es la base de la autorregulación del cuerpo, por lo que si minimizamos esta hiperventilación o respiración acelerada, facilitaremos el camino.
Debemos tener en cuenta si la persona que tenemos delante es alguien de nuestro círculo cercano o no. Si conocemos a la persona, nos será más fácil ayudarla ya que existe una confianza previa. Si no, es importante construir esa confianza con la persona. Puedes acercarte y hablarle con voz lenta y uniforme, presentarte y decir algo como «Estás teniendo un ataque de pánico. Sé que estás pasando por un muy mal momento, pero en un rato todo habrá terminado. Te ayudaré, ¿de acuerdo? Ven… respira conmigo… así… poco a poco… muy bien… lo estás haciendo muy bien”.
Respira con calma
Llegados a este punto que te sugerimos, no hace falta que te ofrezcas a respirar muy hondo; Simplemente que asuma el control de un proceso que normalmente es automático y lo regule de forma contraria a cómo se autorregularía automáticamente ante una amenaza real.
Puedes intentar lo siguiente: inhala el aire durante dos o tres segundos, aguanta dos o tres más y exhala poco a poco hasta soltarlo todo. Ves repitiendo este pequeño ejercicio y verás como tener el control de tu respiración reduce poco a poco los síntomas de ansiedad.